Pagina 12| 07.02.2002| Espectáculo
SE ESTRENA EN ROTTERDAM UNA OPERA CON MUSICA DE TANGO “Traducir personajes a música”
Será protagonizada por Julia Zenko, Susanna Moncayo y Carlos Vittori. Betty Gambartes se basó en una obra de Sergio De Cecco. La música es de Diego Vila y cantan Zenko, Moncayo y Vittori. Sabe que no debería mostrar sorpresa. Que tendría que manifestar que se trata de lo más natural del mundo. Pero le resulta imposible ocultar el azoramiento. O tal vez no sea eso sino simple emoción. Su nombre, Betty Gambartes, aparece con el de Diego Vila, coautor de la ópera Orestes, ultimo tango en la tapa del programa 2002 de De Schouwburg de Rotterdam. Una tapa que, en realidad, no es más que una lista de nombres: los de ellos y, antes y después, los de Mozart, Shostakovich y Prokofiev, entre varios otros. El estreno será el 22 del mes próximo y esta obra basada libremente en El Reñidero de Sergio De Cecco contará entre sus protagonistas a los cantantes Julia Zenko, Susanna Moncayo, Carlos Vittori, Rodolfo Valss y Jorge Nolasco. Con coreografía de Oscar Aráiz, son varios los papeles confiados a bailarines, empezando por los solistas Nicole Nau-Klapwijk –una de las gestoras del proyecto– y Luis Pereyra. Régisseur de numerosas óperas, profesora de puesta en escena, pianista y directora de espectáculos como Arráncame la vida, Sin compasión y Qué has hecho de mí, Gambartes ronda el tango desde hace tiempo. No obstante, asegura que “hay un antes y un después de Orestes”. Esta es la primera vez que escribe íntegramente un libreto de ópera. Y es la primera, también, en que como directora de escena debe habérselas con un texto propio. “Por suerte eso no me inmovilizó”, dice. “Tenía dudas acerca de cómo iba a ser mi trabajo a partir del momento en que terminara de escribir pero, curiosamente, fue igual que siempre. Es decir que pude situarme frente a ese texto con la misma libertad para crear, para actuar frente a él e incluso para modificarlo, que si se tratara de algo ya escrito por otro. Me encontraba muchas veces preguntándome: ‘Y el autor, ¿por qué puso esto acá?’. Hubo una suerte de desdoblamiento que se dio naturalmente a partir de estar haciendo otra tarea.” –¿Cuándo
fue su primer contacto con la obra de De Cecco? ¿Cuáles
fueron las principales dificultades de la adaptación? –En
Orestes hay voces provenientes de distintas tradiciones. –De
la diferencia, desde ya. Es cierto que Susanna Moncayo, que tiene
una escuela de canto lírico, posee una ductilidad increíble y puede
cantar como una cantante popular sin ningún problema. Y de hecho lo
hace, aunque cuando su voz tiene que proyectarse, se nota que tiene
la técnica para hacerlo. Pero me pareció interesante que esas diferencias
entre uno y otro contribuyeran a dibujar las características de cada
personaje. Por otra parte, si bien es cierto que Carlos Vittori es
conocido por su trayectoria en comedias musicales, es un tenor en
toda la regla. Tiene una voz con unaproyección envidiable para muchos
artistas líricos. En cuanto a Julia Zenko, hace un trabajo maravilloso,
no sólo vocal sino de verdadera apropiación del personaje. Su manera
de cantar va mucho más allá de entonar con una bella voz las notas
correctas. Ella es la hija de Morales. Y el gran tema de la obra,
al mismo tiempo que el de la desmitificación del malevo, es la relación
con el padre. –¿Cuál
fue la metodología con la que se trabajó? Diego Fischerman | Copyright © 2001 Pagina 12 | Todos los derechos reservados |